Cocinar con el sol es sabroso, barato y solidario

La cocina solar parabólica ha sido la protagonista de la jornada de hoy en la Universidad de Verano Bancaja de Guardamar. Esta cocina es un buen recurso para trabajar el cambio climático, el problema energético, la nutrición o la cooperación con zonas rurales en las que el acceso a la leña ya es un problema mucho más grave que la escasez y el precio de los combustibles fósiles. Así lo ha explicado Manolo Vilches, comunicador ambiental, en su conferencia “Cocinando con el sol, aprovechando los recursos de la naturaleza. Montaje y prácticas con cocinas solares”, que está incluida dentro del seminario “¿Todavía estamos a tiempo? Intentando frenar el cambio climático”.
El objetivo del taller es tomar conciencia de los recursos naturales que se encuentran al alcance de todos y que son mucho más sencillos y económicos de lo que se piensa. Durante dos días, los alumnos de este seminario han tenido la posibilidad de conocer la cocina solar parabólica, que permite cocinar únicamente aprovechando la luz solar. Primero aprendieron a ensamblar la cocina y a ver cómo de un modo rápido se puede disponer de una cocina ecológica. Y después, han comprobado cómo se cocinan los alimentos de un modo sencillo y sabroso, lo que ha despertado gran interés y fascinación por este revolucionario sistema de cocción.

Según Vilches, estas cocinas no van a desplazar a las cocinas tradicionales, sino que pretenden ser una alternativa ecológica que no contribuya al cambio climático. Además, este tipo de cocina, a la que califica “cocina slow” economiza también nuestro tiempo, ya que no es necesario estar pendiente de la cocción, por lo que podemos destinar el tiempo de cocinar a realizar cualquier otra actividad.
Los consumidores de la cocina solar suelen ser personas vinculadas a la actividad ecológica y naturista, a la educativa y a pequeños proyectos de cooperación en países en vías de desarrollo. Desde la Fundación Terra, se pretende fomentar en el mundo este tipo de cocina, que evita, entre otros, que “el 50% de los árboles que se talan sean utilizados para cocinar, reduciendo así la deforestación”, comenta Manolo Vilches.
Como novedad, destacar que se esta mejorando el diseño de la cocina solar parabólica, simplificando el tiempo de montaje, que de 4 horas (una única vez) se pasará a 1 o 2. Además, próximamente se va a empezar a fabricar en España, concretamente en Murcia.
Manolo Vilches es promotor internacional de la cocción solar de la Fundación Terra, así como comunicador ambiental. Desarrolla diferentes campañas que fomenten el consumo de cocinas solares.